SANTO DOMINGO.- Un nuevo delito conocido como “robo de identidad” mantiene en zozobra a los bancos comerciales, las empresas telefónicas, las embajadas y otras instituciones que descubren cómo personas suplantan a otras en la Cédula de Identidad y Electoral, con la intención de vender propiedades ajenas, obtener un préstamo bancario que no pretenden pagar o, simplemente, ostentar una edad que no posee.
La Junta Central Electoral (JCE) trabaja los expedientes de más 3,500 personas cuyas identidades fueron suplantadas desde el año 2002 a la fecha.
Las estadísticas del tribunal de elecciones indican que más de 900 dominicanos fueron suplantados en su identidad en los años 2006 y 2007.
El juez John Guilliani, responsable de la Comisión de Cancelaciones y Revalidaciones de la JCE, afirma que muchas personas se han enterado de que su identidad ha sido robada cuando le llaman de alguna empresa cobrándoles una deuda que nunca hicieron.
En otros casos, los afectados acuden a los centros de cedulación en procura del documento y se encuentran con que alguien se les adelantó y sacó el documento que les pertenecía.
El delito consiste en obtener en los centros de cedulación de la JCE una cédula con el nombre de la persona suplantada, pero con la fotografía del suplantador.
Guillini afirma que los “ladrones de identidad” usan diferentes trucos para alcanzar su objetivo.
En la mayoría de los casos detectados se valieron de la complicidad de empleados de las oficialías civiles para obtener copias de las actas de nacimientos de personas que no están en la base de datos de la nueva cédula de identidad de la JCE, porque nunca sacaron el documento después del 1992.
“Antes del año 1992 existía la cédula azul y mucha gente, cuando se abrió el proceso de expedición de la cédula nueva se había ido para Estados Unidos, otros murieron o por negligencia no sacaron la cédula nueva”, precisó.
“Por consiguiente, si un suplantador adquiere uno de esos datos y se hace pasar por esa persona, a nosotros nos es casi imposible determinar que hay una suplantación porque aparece como un registro nuevo, porque esos datos no los tenía ninguna otra persona”, indicó el magistrado.
Otros ciudadanos obtuvieron los datos de sus víctimas a través del teléfono o de la internet, por lo que el magistrado Guilliani recomienda a la ciudadanía tener cuidado al facilitar sus datos personales a través de esas vías.
Para corregir esa situación los afectados deben entrar en un largo, costoso y traumático proceso para demostrar a las autoridades electorales que fueron suplantados. El juez de la JCE elaboró un proyecto para detener la suplantación de identidad, el cual fue aprobado por el último pleno de ese tribunal, celebrado el día dos de este mes.
La pieza contempla la creación del “Sistema de Consulta de la Cédula de Identidad y Personal o Cédula Vieja”. Los trabajos para la ejecución de ese proyecto se realizan en coordinación con el magistrado de la Cámara Contenciosa de la JCE, Eddy Olivares.
En esa iniciativa tendrán una participación protagónica, además, los directores de Cedulación, Informática y de Registro Electoral del tribunal de elecciones. Indicó que todos los jueces estuvieron de acuerdo en que es un proyecto muy completo que resolverá todos los problemas relacionados con la suplantación.
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Aumentan Agua al Granel
Afiliados de la Asociación de Procesadores de Agua, APROAGUA, efectuaron aumento de cinco pesos al botellón de agua potable después de realizar estudios de factibilidad que arrojaron la necesidad de producir el leve aumento.
Rafael Martínez Hazim, presidente de la asociación dijo que era una necesidad realizar el aumento ya que es imposible llevar un producto de calidad a la población al costo que se estaba produciendo el agua procesada.
“APROAGUA, se mantiene constantemente realizando chequeos a las plantas afiliadas para garantizar que el producto servido a los consumidores cuente con los estándares de calida necesario para beneficio de la población, por lo que no es ético engañarlos vendiéndole un producto de baja calidad, como el agua colada que venden algunas plantas a un precio por debajo de lo establecido por la asociación” expreso Martínez Hazim.
El presidente de APROAGUA explicó que es importante que la población entienda y se concientice, en el sentido de que es imposible que un botellón de agua procesado con los rigores requeridos para el agua de consumo humano y servido a domicilio como lo hacen nuestras plantas pueda costar menos de 25 pesos, si la están vendiendo a menor precio hay que revisar cual es el gasto de esas plantas, porque nadie hace negocio para perder.
Rafael Martínez Hazim, dijo que APROAGUA prepara un evento que saldrá a relucir en los próximos días con el propósito de premiar la fidelidad de nuestros consumidores y devolver con muchos regalos parte de los benéficos recibidos; el nuevo orden comercial demanda una interacción mas concreta entre el suplidor y consumidor y nosotros nos consideramos vanguardistas en ese sentido.
En cuanto a la parte que tiene que ver con la regulación del agua de consumo humano por parte de las autoridades de salud, dijo que APROAGUA esta haciendo todo lo que este a su alcance para junto a las autoridades frenar a los asesinos de la salud del pueblo que venden el producto sin ningún tipo de control de calidad.
Gregory Cabral
17 de agosto de 2007
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